El sistema ventricular consta de una serie de cavidades, conocidas como ventrículos, unidos entre sí, que mantiene, protege y da estructura al cerebro; además de contener líquido cefalorraquídeo. Se trata de 4 ventrículos: los ventrículos laterales que, a través del orificio de Moro, se comunican con el tercer ventrículo que, a su vez, a través del acueducto de silvio, se conecta con el cuarto ventrículo. Este último ventrículo está comunicado con el conducto ependimario de la médula espinal y, a través de los agujeros de Luschka y Magendie, con el espacio subaracnoideo (está en todo el SNC entre la piamadre y la aracnoides).
Anatomía del Sistema Ventricular Cerebral. Sacada de: https://neuronotesblog.wordpress.com/2013/08/29/anatomia-del-sistema-ventricular-cerebral/
El líquido cefalorraquídeo (LCR) es una solución salina secretada de manera constante por los plexos coroideos (1 L/día), unas vellosidades formadas por células ependimarias, vasos sanguíneos y tejido conjuntivo, que se extienden a lo largo del suelo del ventrículo lateral, desde el asta inferior, pasando por el atrio, y que se continúa a través del foramen interventricular o de Monro y se ancla al techo del tercer ventrículo. También se encuentran en la parte caudal del cuarto ventrículo y se extiende lateralmente dentro del foramen de Luschka. La producción de LCR se lleva a cabo por filtración del suero de la sangre que llevan los capilares que conforman los plexos coroideos.
El LCR circula por los ventrículos cerebrales, el conducto ependimario de la médula espinal y por el espacio subaracnoideo. Funciones:
- Amortigua (evita el rozamiento o presión excesivas) el encéfalo en la bóveda craneal.
- Regulación metabólica: regula el medio extracelular neuronal.
- Limpieza interna nerviosa: intercambio de solutos con el líquido intersticial del SNC para eliminar sustancias de refugallo (no necesarias para el SNC).